¿Qué es la ecoansiedad?

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La pérdida de biodiversidad, la degradación del entorno y los desastres naturales han hecho que la preservación del medio ambiente se haya convertido en una prioridad. Cada vez son más las personas -y las entidades- sensibles al cambio climático y conscientes de la necesidad de frenarlo mediante un estilo de vida sostenible y respetuoso con el planeta. Una forma de ver el mundo que, lejos de ser pasajera, va ganando adeptos y convirtiéndose en norma. 

Sin embargo, en algunos casos, la preocupación por el medio ambiente va un poco más allá y se convierte en angustia, y es lo que se conoce como ecoansiedad. Un término cuyo significado ha sido acuñado por la American Psychology Association en 2017 para referirse al ”temor crónico a sufrir un cataclismo ambiental que se produce al observar el impacto aparentemente irrevocable del cambio climático y la preocupación asociada por el futuro de uno mismo y de las próximas generaciones”.

Pero, ¿de qué hablamos cuando hablamos de ecoansiedad?

La ecoansiedad es una respuesta emocional y psicológica al estado actual del medio ambiente y a las preocupaciones sobre su futuro. A medida que el cambio climático se vuelven más evidentes y amenazantes, muchas personas experimentan una profunda ansiedad y angustia relacionada con estos problemas.

Puede manifestarse de diversas formas: desde preocupación constante hasta gran impotencia. Las personas que la experimentan pueden sentirse angustiadas por la extinción de especies, por la degradación de los ecosistemas, por la contaminación y por los desastres naturales. Sentimiento que pueden agravarse aún más con otros como la incertidumbre por el futuro del planeta.

¿Qué es la ecoansiedad? Significado y definición

Cómo afecta la ecoansiedad a las personas

Aunque la ecoansiedad puede afectar a personas de todas las edades, lo cierto es que son los más jóvenes los que corren riesgo a sufrirla. Así lo indica un informe publicado en la revista The Lancet, que muestra que el cambio climático y  sus efectos afecta a la salud mental y emocional del 45% de los menores de 26 años. Algunos de las consecuencias más comunes son:

  • Síntomas de ansiedad y depresión: Las personas con ecoansiedad a menudo experimentan síntomas similares a los de la ansiedad y la depresión, como nerviosismo, tristeza, insomnio y falta de concentración.
  • Sentimientos de impotencia: La sensación de que los problemas ambientales son demasiado grandes para abordar puede traer consigo a una sensación de impotencia y desesperanza.
  • Aislamiento social: La preocupación por el medio ambiente puede hacer que algunas personas se aislen  socialmente. Un retiro que afecta gravemente a su día a día y a sus relaciones.
  • Fatiga emocional: La constante exposición a noticias negativas sobre el medio ambiente puede generar una fatiga emocional. Una sentimiento que dificulta aún más la capacidad de afrontar el problema.

¿Qué es la solastalgia?

La solastalgia es el dolor y la angustia que sienten las personas cuando su entorno natural se degrada debido a cambios ambientales, y se trata de un término acuñado por el filósofo Glenn Albrecht para. A diferencia de la ecoansiedad, enfocada en las preocupaciones sobre el medio ambiente global, la solastalgia se centra en las repercusiones del cambio climático en el entorno local.

Por ejemplo, las personas que han vivido en una comunidad rural durante generaciones pueden experimentar solastalgia cuando ven que su paisaje cambia debido a la deforestación o la urbanización, incluso si no están pensando en términos globales.

La influencia de la ecoansiedad y solastagia en las personas

Consejos para hacer frente a la ecoansiedad y la solastalgia

Afrontar la ecoansiedad y la solastalgia es fundamental para mantener una buena salud mental y emocional. También para combatir el cambio climático de forma efectiva. Algunos consejos que los profesionales de la psicología recomiendan para hacer frente a es estos desafíos:

  • Educación y conciencia: formarte e informarte sobre los problemas ambientales puede ayudar a reducir la ansiedad. Ayudará a comprender mejor las causas y las soluciones a los posibles problemas y, sobre todo, a tener mayor control sobre la situación.
  • Acción personal: tomar medidas en tu vida cotidiana para reducir tu huella ecológica puede aliviar la ecoansiedad. Pequeños cambios, como reducir el consumo de plástico o ahorrar energía, pueden marcar la diferencia.
  • Conexión con la naturaleza:pasar tiempo al aire libre y conectarte con la naturaleza puede ser terapéutico. Caminar en el bosque, practicar la jardinería o simplemente disfrutar de un parque local puede ayudar a calmar la mente y reducir el estrés.
  • Apoyo social: Compartir tus preocupaciones con amigos y familiares puede ser reconfortante. Encontrar comunidades en línea o grupos locales de acción ambiental también puede ser una excelente manera de conectarte con otros que comparten sus preocupaciones.
  • Prácticas de mindfulness y meditación: estas técnicas pueden ayudarte a reducir la ansiedad y tranquilizarte. La atención plena puede ayudarlo a concentrarte en el presente en lugar de preocuparte por el futuro.
  • Busca ayuda profesional: si la ecoansiedad o la solastalgia interfieren significativamente en tu vida, considerar la terapia con un profesional de salud mental especializado en estas áreas puede ser beneficioso.

En resumen, la ecoansiedad y la solastalgia son respuestas emocionales comprensibles a los desafíos ambientales actuales. Sin embargo, es importante reconocer estos sentimientos y tomar medidas para afrontarlos de manera saludable. Con la educación, la acción personal y el apoyo adecuado, podemos abordar estos problemas y trabajar juntos para un futuro más sostenible y equitativo.

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