Industria del plástico: problemas en escasez de materias primas

La industria del plástico está en alerta. La caída de producción de polímeros, los problemas de exportación de Asia o Norteamérica y la subida del precio del petróleo han provocado una escasez de materias primas sin precedentes. Una situación que, de no mejorar, repercutirá directamente en las empresas transformadoras de plástico y en sus clientes. Y es que la falta de suministro conlleva una bajada en la producción de sectores como el alimentario, el farmacéutico o el automovilístico y un encarecimiento del producto final. En este contexto, el plástico reciclado supone una solución eficaz a la escasez de materias primas y una apuesta por la preservación del planeta.

Problemas con el supply chain de materias primas

La Asociación Española de Industriales de Plásticos (ANAIP) o la European Plastics Converters (EUPC) son contundentes a la hora de referirse al estado actual de la industria plástica europea: se enfrenta a una escasez de materias primas sin igual. De hecho, desde 2015, los fabricantes de este material no vivían una situación similar.  ¿La causa principal? La rotura en la cadena de suministros causada, entre otras cosas, por la caída de la producción de polímeros durante la pandemia, por la subida del precio del petróleo a nivel mundial y por las trabas en la exportación con el continente asiático y americano.

Estos problemas con el supply chain de materias primas han repercutido directamente en el día a día de las empresas transformadoras de plástico, pero también en el de otras compañías ajenas a esta industria. Y es que la escasez de recursos ha causado un incremento de los costes de fabricación, ha paralizado la producción de este material y ha provocado el desabastecimiento de sectores claves en la sociedad como el alimentario o el farmacéutico.

Aumento en los costes del transporte

A pesar que la rotura del supply chain es uno de los problemas más graves a los que se enfrenta la industria del plástico europea, no es el único impedimento que este sector debe superar. El aumento de los costes del transporte está teniendo consecuencias nefastas para una industria que, en gran medida, depende de las exportaciones con Asia y Norteamérica para el suministro de materias primas. La subida del petróleo ha encarecido la producción de plástico, pero también el transporte de materiales. Dos factores que inciden de forma directa en el coste del producto final y que afectan a nivel global a toda la sociedad. Desde las empresas transformadoras de plástico hasta los fabricantes, distribuidores y la ciudadanía se ven afectados por este incremento en los precios.

Compañías más afectadas

La industria plástica es una de las principales afectadas por la escasez de polímeros y aditivos, pero la crisis que vive este sector se extiende a todos los ámbitos de producción. El porqué de esta situación hay que buscarlo en la importancia de este material para la sociedad. Y es que, cuando hablamos del plástico, lo hacemos de un recurso imprescindible para la fabricación de productos tan generalizados como necesarios en nuestro día a día: desde  envases para la industria alimentaria y farmacéutica hasta piezas para el sector sanitario o al transporte y logística de productos.

Así, algunas de las compañías más afectadas son:

• Alimentaria. el plástico es uno de los materiales más utilizados en la industria alimentaria para el envasado y empaquetado de alimentos y bebidas. Es habitual ver estos productos en supermercados, pero también en establecimientos de restauración y comercios de todo tipo. La escasez de materias primas afecta a la fabricación de envases que garantizan la seguridad e higiene alimentaria. Sin ellos, la preservación de los alimentos, así como su transporte, resulta complicada.
• Sanitaria. Otro de los sectores afectados por la rotura de la cadena de suministros en la industria plástica es el sanitario. Gracias a on este material se fabrican jeringas, guantes, implantes médicos, dispositivos y una serie de productos que son necesarios para nuestra salud y bienestar. La rotura en la cadena de suministros actual  afecta de forma directa y contundente en este sector.
• Logística. Para el envío de materias primas y productos, se necesitan contenedores y productos tan extendidos en el sector comercial y logístico como el papel film. La escasez de materiales para su fabricación, unido al aumento del precio del petróleo, encarece de forma importante el transporte y repercute en fabricantes y ciudadanía.

Falta de productos básicos y sanitarios

Si no se opta por una economía circular, basada en la producción de nuevos recursos a partir de materiales reciclados, las consecuencias de la escasez de materias primas no se hará esperar. Cada vez será más habitual hacer frente a problemas de supply chain como el actual. Una situación que, además de afectar al abastecimiento de productos básicos y sanitarios elaborados con plástico, lo hará al bolsillo de empresas y ciudadanía. Al ser objetos de difícil fabricación, aumentará su valor en el mercado y se reducirá el número de personas que puedan optar a ellos. 

Empresas como SINTAC han apostado por el reciclaje del plástico para crear productos con la misma calidad y propiedades, pero mucho más sostenibles con el planeta. Una acción que, además de asegurar el suministro de materias primas necesarias para la fabricación de productos de primera necesidad, contribuye al ahorro de agua, energía y recursos naturales. Factores imprescindibles en la lucha contra el cambio climático y sus efectos para el planeta.

Miles de pymes en peligro

En Europa hay más de 50.000 pequeñas y medianas empresas (pymes) especializadas en la transformación del plástico. Según datos de la EUPC, el 90% de ellas se ha visto afectada por la escasez de materias primas y ha tenido que limitar sus pedidos, su producción y, en muchos casos, su plantilla. Una situación crítica que, a pesar de iniciarse en época pandémica, ha empeorado en los últimos años y ha llevado a las pymes especializadas en la fabricación de plástico a la reducción de su cartera de clientes y de beneficios.

Como importador nato de materias primas y aditivos para la elaboración del plástico, nuestro continente debe tomar cartas en el asunto y transitar hacia la economía circular. Un sistema de producción y consumo que se basa en las 3R: reducción, reutilización y reciclaje.